El secreto de las bolsitas que vienen en las cajas de zapatos: ¿para qué sirven? - LA NACION

2022-09-23 19:23:07 By : Mr. kesson hu

Con una necesidad marcada de conseguir un calzado que se adecúe a al día a día, una persona se dirige a una zapatería para conocer los diferentes modelos y colores. Una vez elegido el producto, y al estar en un constante diálogo con el vendedor, el comprador elige el talle, recibe algún consejo sobre la adaptabilidad del material a esa parte del cuerpo y se dispone a pagar.

Todo ese circuito, que parece común y cotidiano, esconde un pequeño detalle que muy pocos saben y se ubica en la misma caja del calzado que uno eligió. Al costado de las mismas o dentro de ellas, aparece una pequeña bolsita, símil a un saquito de té, la cual se mantiene cerrada y sirve para una cuestión fundamental: conservar el material en su traslado y almacenamiento dentro de los galpones donde se ubican las cajas, ordenadas por talle y color.

En definitiva, como objetivo principal de su utilización, esta bolsita cuida la mercancía durante los traslados entre fábricas y garantiza la calidad del producto, además de servir como una capa que protege de la humedad y los malos olores que pueden impregnarse en la tela.

Pero su uso no es solamente para estos temas, sino que se extiende a otros asuntos que, en la vorágine de la rutina diaria, son pasados de largo y pueden ser de mucha ayuda para conservar algunos materiales. Por ejemplo, un caso muy común, es que un celular pueda sufrir una caída a un lugar donde haya agua y la persona entre en pánico al no saber cómo solucionar ese problema que puede afectar la funcionalidad del aparato.

Para sustituir al antiguo método de colocar el celular en arroz, esta bolsita, con un gran poder de absorción, es un aliado para subsanar el daño producido por el agua. ¿Cómo emplearlo? En una caja, ubicar el celular -previamente secado con una servilleta u otro elemento- y rodearlo de varias de estas bolsas que contribuirán, de manera activa, para que vuelva a su estado normal.

Otro de los usos, en medio de una época de furor en la colección de figuritas, es para que las hojas de los álbumes no pierdan su color y se deterioren sus páginas con el correr del tiempo, lo que convierte a estas piezas en objetos de colección.

Al ser un aliado contra el deterioro de los objetos, estos paquetes se encuentran dentro de las cajas de zapatos, prendas para vestir y en la caja de los electrodomésticos, entre otros elementos. Dentro de los mismos, se encuentra una sustancia que les da nombre y es el gel de sílice o silicagel.

Una de las preguntas frecuentes sobre estos elementos es su vida útil. Si bien no existe un dato preciso o una fecha de vencimiento para conocer su caducidad, el gel de sílice tiene una duración, mínima, de un año y dependerá de los factores externos para que su funcionalidad se prolongue durante el tiempo.

Otra de las inquietudes que se posan sobre este magnífico invento para proteger los productos es si es tóxico o no. Según el sitio Webmd, no es una sustancia tóxica, pero sí un peligro de asfixia para los niños más pequeños. En algunos casos particulares, los fabricantes suelen cubrir el gel con cloruro de cobalto, un compuesto nocivo para la salud que al ser ingerido puede provocar náuseas y malestar corporal.

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